Este curso ni en los peores sueños lo hubiese imaginado, pero bueno es lo que nos ha tocado vivir. No es la educación que me gusta ni por la que vengo luchando cuso tras curso, pero ya vendrán tiempos mejores.
Los peques se han adaptado muy bien a la nueva situación escolar, han interiorizado muy bien las nuevas normas: no compartir el almuerzo, lavarse más a menudo las manos, no salir de nuestra zona de patio...
Hay tantas cosas que se van a perder los peques y las familias este curso que me da mucha pena: no heremos excursiones, las familias no podréis entrar al aula o al centro a realizar actividades, no tendremos biblioteca viajera como la hacíamos cursos anteriores (será online), no podremos realizar actividades con los compis de otras clases, en el patio no pueden estar con sus hermanos... Pero lo que no se van a perder los peques son tantas y tantas actividades divertidas en nuestra aula que espero disfruten con ellas.
El hecho de que ya me conozcan es una gran ventaja, pues aunque me vean con mascarilla saben que sigo siendo "la loca de su maestra".
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